El masaje de los pies en puntos concretos y bien especificados puede aliviar numerosas dolencias, que van desde los dolores de espalda hasta las gastritis, dolores menstruales, estreñimiento, asma o cefalea.
La reflexoterapia podal se basa en el hecho de que ciertos puntos de los pies se vuelven más sensibles cuando existe alguna enfermedad: el aumento del dolor en ciertos puntos de los pies indicaría la presencia de la dolencia, y el masaje en dichos puntos la aliviaría. Por ello, la reflexoterapia podal no es un simple masaje de placer, ya que suele producir incluso dolor cuando el experto presiona sobre los puntos seleccionados.
Está indicada en casos de dolor en el cuello, columna lumbar, cuando hay menstruaciones dolorosas, estreñimiento, e incluso casos de asma. Es cierto que para algunas de estas dolencias la reflexoterapia podal es sólo una ayuda terapéutica, no un remedio definitivo (como en el caso del asma), pero puede complementar la acción de los fármacos. |
No está indicada en los casos de fiebre, ni tampoco en las mujeres embarazadas.
Se denomina lesión muscular a una anomalía generalmente dolorosa producida en los músculos como consecuencia de golpes externos o sobreesfuerzos.
Las lesiones musculares afectan generalmente a los deportistas y a los trabajadores profesionales de todo ámbito y categorías.
Existen múltiples tipos de lesiones musculares, pueden ser ligamentosa, muscular o articular, o bien, presentar una combinación, ya sea músculo-ligamentosa o ligamento-articular. Por otra parte los músculos de los miembros inferiores se afectan con mayor frecuencia que los de los miembros superiores.
Se pueden clasificar según sean producidas por acortamiento o por elongación.
Inflamación muscular de efecto retardado: no es una lesión propiamente dicha pero se trata de un dolor que no aparece durante la actividad física sino entre dos o tres días después de un ejercicio intenso o desacostumbrado. Puede afectar a uno varios músculos. La causa de este dolor se debe a la acumulación de ácido láctico y pirúvico. El dolor es más intenso en la zona musculotendinosa, o sea en la zona de transición entre músculo y tendón.
Contracturas: se producen en los músculos que han actuado con cierta sobrecarga y durante un tiempo prolongado. Sus fibras están sanas, pero palpando se encuentra una mayor dureza (nódulos). Otra causa de la contractura es el estrés; el nerviosismo repercute sobre los exteroceptores del cuello, provocando la pesadez de hombros, el cansancio general. Suele aparecer de forma súbita y se mantiene varios días. La persona tiene como una “bola” y al tacto siente como que “le brinca” el músculo.
Calambres: estos se originan por trastornos circulatorios o hidrosalinos causados por la depresión de sodio, potasio y magnesio, debido a la pérdida de minerales durante el esfuerzo, y por causas de factores emocionales combinados con los motivos anteriores. Aparecen en gemelos o antebrazos. Es una contracción muscular involuntaria, intensa y dolorosa de varios grupos de fibras. Aparece como consecuencia de un sobreesfuerzo para ese músculo, ya sea porque el ejercicio era de una intensidad muy alta, o porque se reinicia la actividad deportiva luego de un período de descanso
Distensiones: no existe lesión de las fibras musculares. Se produce como consecuencia de un sobreestiramiento del músculo pero sin llegar a una rotura. Se produce inflamación y aparece el dolor. Se conoce también como tirón muscular. Es muy propio que lo sufran los futbolistas cuando están en competición.
Contusión: se produce cuando el músculo se golpea contra una estructura sólida. Son muy frecuentes en los deportes de contacto. Presentan un dolor difuso, o sea difícil de determinar en un punto exacto, se puede apreciar que la zona contusionada está hinchado ocasionando un edema.
Desgarro fibrilar: es una rotura de un cierto número de haces musculares, pero sin afectar todo el espesor del músculo. Hay hemorragia local (morete) y en respuesta, también se dé un proceso de reparación de tejido.
Desgarro total: esta lesión es la más grave de todas las lesiones musculares porque afecta todo el músculo. Rápidamente se produce un edema y la piel se pone roja y caliente. El dolor es muy intenso, y no se puede continuar la actividad . Dado que la ruptura es total, se puede apreciar un hundimiento en la zona afectada. El tratamiento es quirúrgico, para reparar el daño. Lo más frecuente es que se dé en miembros inferiores.
Una luxación es toda lesión cápsulo-ligamentosa con pérdida permanente del contacto de las superficies articulares, que puede ser total (luxación) o parcial (subluxación).
Se hace mediante una exploración radiológica en los dos planos, en la que se ve la pérdida de contacto permanente de las superficies articulares, bien total o bien parcial. Si bien, en muchísimas ocasiones se evidencia por signos externos como deformidad, posturas especiales, etc. como el hombro en charretera en la luxación de hombro.
La causa de la epicondilitis es una inflamación de las inserciones musculares en el epicóndilo del codo. Es una variedad de tendinitis. La epicondilitis lateral, también llamada “codo de tenis”, es el término que se utiliza cuando las inserciones musculares en la parte lateral del codo están inflamadas.
La epicondilitis generalmente se relaciona con el sobreuso o con un traumatismo directo sobre la zona. El dolor es más intenso después de un uso intenso o repetitivo de la extremidad. Las actividades que suponen prensión fuerte o rotaciones del antebrazo lo agravan especialmente.
(Tendinitis del manguito de los rotadores/ Síndrome de pinzamiento/ Bursitis subacromial)
La tendinitis del manguito rotador es una patología por sobreuso que provoca dolor y discapacidad en el hombro y parte superior del brazo. A menudo se le denomina “pinzamiento” o bursitis. Estos 3 nombres describen la misma condición, causada por la utilización del hombro y brazo en tareas que son repetitivas y que con frecuencia incluyen movimientos del brazo por encima del plano del hombro.
Las actividades deportivas que se asocian con frecuencia a esta condición son los deportes de raqueta, la natación, los deportes de lanzamiento y el levantamiento de pesas.
Otras actividades como pintar, conducir o la carpintería tam-bién pueden causar y/o agravar los síntomas. La tendinitis a menudo provoca dolor con acciones como peinarse, ponerse una chaqueta, meterse la camisa o dormir sobre el hombro o con el brazo sobre la cabeza. Esta patología puede provocar un dolor agudo, o puede ser crónica con un dolor sordo que dura varios meses.
Existen varias etapas en el diagnóstico de la tendinitis del manguito rotador:
El tratamiento generalmente es no-quirúrgico. Los objetivos del programa de tratamiento son, en primer lugar reducir la inflamación y posteriormente distender y fortalecer los músculos que componen el manguito rotador. La inflamación usualmente es controlada con reposo, hielo y medicación oral (antiinflamatorios).
La artrosis es una enfermedad producida por el desgaste del cartílago, un tejido que hace de amortiguador protegiendo los extremos de los huesos y que favorece el movimiento de la articulación. Es la enfermedad reumática más frecuente, especialmente entre personas de edad avanzada. Se sabe, por ejemplo, que en España la padece hasta un 16 por ciento de la población mayor de 20 años y, de ellos, las tres cuartas partes son mujeres.
No se sabe aún con certeza cuál es el origen de este padecimiento. En la artrosis, la superficie del cartílago se rompe y se desgasta, causando que los huesos se muevan el uno contra el otro, causando fricción, dolor, hinchazón y pérdida de movimiento en la articulación.
La artrosis puede afectar a cualquier articulación del cuerpo. No obstante, las más frecuentes son la artrosis de espalda, que suele afectar al cuello y la zona baja de la espalda (artrosis lumbar); la artrosis de la cadera y la rodilla, y la artrosis de manos, trapecio-metacarpiana (Rizartrosis) y pies, que suele iniciarse a partir de los 50 años.
Usualmente la artrosis comienza lentamente. Tal vez comience con dolor en las articulaciones después de hacer ejercicio o algún esfuerzo físico. La artrosis puede afectar a cualquier articulación, pero ocurre más frecuentemente en la espina dorsal, manos, caderas o rodillas.
La artrosis en los dedos parece que ocurre en ciertas familias, por lo que se piensa que podría ser hereditaria. Se ha observado que afecta más a mujeres que a hombres, especialmente después de la menopausia. Pueden aparecer pequeños nódulos de huesos en las articulaciones de los dedos. Los dedos se pueden hinchar, ponerse rígidos y torcerse. Los dedos pulgares de las manos también pueden verse afectados.
Las rodillas son las articulaciones sobre las que se carga la mayor parte del peso del cuerpo, por lo que son una de las más afectadas por la artrosis. Se pueden poner rígidas, hinchadas y adoloridas, causando que sea difícil caminar, subir escaleras, sentarse y levantarse del asiento, y usar bañeras. Si no se recibe tratamiento, la artrosis en las rodillas puede llevar a discapacidad. A la artrosis de las rodillas se le llama gonartrosis.
En las caderas la artrosis puede causar dolor, rigidez e incapacidad grave. Las personas con esta condición pueden sentir dolor en las caderas, en las ingles, en la parte interior de los muslos o en las rodillas. A la artrosis de las caderas se le llama coxartrosis.
Rigidez y dolor en el cuello o en la parte de abajo de la espalda pueden ser el resultado de artrosis de la espina dorsal. También puede generar debilidad o adormecimiento en los brazos o en las piernas y deterioro funcional. Según la localización específica de la artrosis en la columna vertebral, el padecimiento se denomina lumboartrosis (vértebras lumbares), cervicoartrosis (vértebras
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Osteopatía
Tratamiento Integral del Pie:
Estudio Completo Funcional y Morfológico del Pie
Alteraciones derivadas a Rodillas, Cadera y Espalda
Ortosis para Corrección y
Protección de Dedos Deprimidos
La verruga es una pequeña excrescencia cutánea, dura y rugosa, que se localiza principalmente en la piel de los pies, de las manos o del rostro. Las verrugas son causadas por una infección viral de las células que residen en la capa superficial de la piel. El nombre del virus que produce la verruga es el virus del papiloma humano (VPH). Las verrugas generalmente son del mismo color de la piel y son ásperas al tacto pero también pueden ser oscuras, planas y suaves. El aspecto de una verruga varía según donde está creciendo.
La uña enterrada es típicamente el resultado del crecimiento inapropiado del borde de la uña y su aproximación a la piel que le rodea. La mayoría de los casos ocurren con la uña del dedo gordo. Cortándolas demasiado cortas o pegadas, redondeando el borde, o simplemente excavando con una tijera la uña se pueden producir a menudo dolores y lesiones al borde de la uña. Enrojecimiento de la piel, la presencia de pus, el dolor, o la presión localizada son señales de uñas enterradas, irritación de la piel e infección asociada. Puede ser imposible de llevar un zapato cerrado. La causa más común de las uñas enterradas es el corte impropio de las mismas.