Se trata de una pérdida del arco plantar longitudinal, es decir, un aplanamiento, disminución o ausencia de la bóveda plantar. Generalmente se asocia con un valgo (indica una deformidad en la que el ángulo de una parte se separa de la línea media del cuerpo) del talón. El paciente desgasta el calzado por la parte de dentro.
Es una patología caracterizada por tener un pie que presenta un arco longitudinal plantar elevado con una concavidad de la bóveda mayor que hace que sólo se apoye la parte anterior y posterior del pie (es decir, existe una flexión plantar del antepie sobre el retropie).
La uña con hongo u onicomicosis se define como la afección de las uñas por la infección de un hongo o varios tipos de hongos lo cual desencadena en aumento o destrucción de la uña, así como cambios en la coloración de la misma. Las afecciones más comunes son las siguientes:
Las callosidades son trastornos que aparecen en ciertas zonas de la piel, y que se van haciendo más gruesas y duras, generalmente en zonas sometidas a rozamientos y traumatismos repetidos, como sucede en la planta y caras laterales de los pies, en contacto con los zapatos. Algunas veces el engrosamiento y endurecimiento de la piel conocido técnicamente como hiperqueratosis, adquiere una forma más dura, en forma de cono doloroso y se localizan en las articulaciones de los dedos de los pies o entre los mismos.
Es muy importante para nuestra salud y estética la reposición inmediata de las piezas perdidas. Cuando la pérdida de algunos dientes o muelas no nos supone ningún problema para la masticación o para la estética pensamos, erróneamente, que no es necesaria su reposición. Esta pérdida es el comienzo seguro de una desorganización progresiva de toda la dentadura. Además, colabora en la aparición de caires y de enfermedades de las encías. Se produce también una acumulación de restos alimenticios causando un desagradable mal aliento.
El principal objetivo de la Odontología moderna es intentar conservar nuestras piezas naturales.
La Enfermedad Periodontal es la enfermedad más extendida del ser humano, incluye la antiguamente llamada Piorrea, y consiste en una infección situada debajo de la encía, generalmente indolora, que inflama la encía, hace sangre fácilmente y destruye el hueso que soporta los dientes, provocando la pérdida dentaria.
Uno de los procedimientos por el que se restaura una cavidad de caries y se devuelve al diente su forma perdida, para que podamos ejercer una buena masticación de los alimentos, se conoce profesionalmente como “obturación dentaria”; coloquialmente lo llamamos “empaste dentario”.
Desvitalización del diente
El principal objetivo de la Odontología moderna es intentar conservar nuestras piezas naturales.
Con la edad las estructuras periodontales que rodean a los dientes y que están compuestas por las estructuras óseas y los ligamentos que los sujetan, sufren un proceso de degeneración que expone a las raíces de los dientes.
La propia estructura del diente también se modifica con la edad y no es raro que se pierda parte de la sustancia dental como consecuencia del desgaste que los años van haciendo sobre la superficie del diente. El esmalte puede perforarse exponiendo la capa más interna (la dentina), que es el componente fundamental de la mayor parte de la estructura del diente, tornándose más seco y menos permeable con la edad y, por tanto, más frágil.
En nuestra clínica usamos radiología digital porque nos preocupamos por nuestros pacientes.
La Radiología dental clásica requiere de películas o placas radiográficas, que se sensibilizan mediante un disparo de Rayos X. Una radiografía es el producto de una mezcla de tonos desde grises hasta negros y blancos, acorde con la continuidad del tono de la imagen y que dependen del tejido que atraviesan los rayos ionizantes.